LOS TRASTORNOS DEL SUEÑO MÁS FRECUENTES

Dentro de  los innumerables trastornos y alteraciones que padece el ser humano, los trastornos del sueño se encuentran entre los más comunes.

En ocasiones, imponemos ritmos no naturales de sueño (por exámenes, turnos laborales, actividades lúdicas, etc.) y podemos apreciar claramente cómo se altera nuestra salud física, psicológica y emocional.

El no dormir adecuada y satisfactoriamente nos afecta. A nivel psicológico, y dentro del aspecto emocional, aparece irritabilidad, cambios de humor, desmotivación, apatía, etc. En el ámbito cognitivo, surgen problemas de memoria, enlentecimiento y déficit de atención y concentración en tareas concretas. Todo ello repercute, indudablemente, en la actividad social (amigos, familia, pareja,..) y comportamental (rendimiento laboral, escolar) de quienes lo padecen. Además, los afectados tienen mayor probabilidad de padecer ansiedad y depresión, así como mayor propensión a abusar del alcohol u otras drogas. A nivel físico, además de la fatiga y el cansancio, el sistema inmunitario se ve perjudicado y quienes sufren trastornos del sueño manifiestan más enfermedades.

Las alteraciones transitorias del sueño forman parte de la vida cotidiana y ocurren en todas las edades; pero cuando la situación persiste en el tiempo, se pueden desencadenar consecuencias muy graves.

Determinados trastornos afectivo/emocionales provocan alteraciones del sueño crónicas. Por ejemplo, cuando nos enfrentamos a un problema difícil (perdemos a un ser querido, tenemos dificultades en el trabajo, con la pareja, etc.) es frecuente que nuestro sueño y su calidad, se vea afectado de forma prolongada. El insomnio, muchas veces, está asociado a síntomas ansioso depresivos y puede actuar como un modulador de su intensidad.

Determinados trastornos del sueño, de origen neurológico y/o biológico como la narcolepsia y el SAHS (Síndrome de Apnea/hipoapnea del sueño) también tienen un fuerte componente afectivo/emocional y generalmente, llevan asociados graves síntomas psicosociales. Su diagnóstico resulta, en muchas ocasiones complicado por el desconocimiento social (e incluso entre los facultativos sanitarios) y algunos de estos enfermos han recibido tratamientos inadecuados durante años lo que ha contribuido a empeorar su sintomatología. La aceptación del trastorno generalmente crónico (y que puede ser altamente invalidante), y la adaptación a las consecuencias derivadas del mismo, tampoco resulta fácil para quien lo sufre ni para su entorno más cercano.

ALGUNOS TRASTORNOS DEL SUEÑO

  • INSOMNIO:

El insomnio se define como la dificultad para iniciar o mantener un sueño continuo (insomnio de mantención o conciliación respectivamente) y puesto que es un síntoma subjetivo, requiere siempre investigación de la causa que lo provoca. No es raro que esté asociado a enfermedades psiquiátricas, dentro de las que destacan los trastornos del ánimo, sin embargo, hay que tener presente que cualquier cuadro psiquiátrico puede producir insomnio.

Como causa de este problema destaca el denominado «insomnio psicofisiológico crónico», condición en la que existe una marcada ansiedad por dormir de parte del paciente. Hay asociaciones negativas con el dormitorio, pues este no se relaciona con dormir, sino más bien con aquel lugar de tortura donde la persona permanece despierta dándose vueltas durante gran de parte de la noche.

  • APNEA DEL SUEÑO:

La apnea del sueño es un trastorno común en el que la persona que lo sufre hace una o más pausas en la respiración o tiene respiraciones superficiales durante el sueño.

Las pausas pueden durar entre unos pocos segundos y varios minutos. A menudo ocurren entre 30 veces o más por hora. Por lo general, la respiración vuelve a la normalidad, a veces con un ronquido fuerte o con un sonido parecido al que una persona hace cuando se atraganta.

Casi siempre la apnea del sueño es un problema crónico (constante) de salud que altera el sueño. La persona pasa de un sueño profundo a un sueño liviano cuando hay una pausa en la respiración o cuando la respiración se vuelve superficial.

Por esta razón, el sueño es de mala calidad y se siente cansancio durante el día. La apnea del sueño es una de las principales razones por las cuales una persona puede sentir mucho sueño durante el día.

  • NARCOLEPSIA:

La narcolepsia, otra causa de excesiva somnolencia, es un trastorno del sueño poco frecuente pero importante de reconocer. Se caracteriza por la presencia de verdaderos «ataques de sueño», parálisis del sueño (incapacidad de moverse al despertar o quedarse dormido), alucinaciones oníricas (sueños muy vívidos) y cataplexia (pérdida del tono muscular evocada por emociones, particularmente risa).

RECOMENDACIONES PARA UN BUEN DORMIR

  • Ambiente apacibles, silenciosos, oscuros o con luz tenue.
  • No ingerir líquidos ni alimentos al menos dos horas antes de dormir.
  • No fumar, ni ingerir cafeína, alcohol, azúcar o chocolate tres horas antes de ir a dormir
  • Establecer unos hábitos previos a ir a la cama, regulares e intentar reducir el nivel de estímulos y de actividad física o intelectual compleja un rato antes de ir a dormir
  • Realizar ejercicio físico regular ayuda a descansar mejor, pero se tiene que evitar hacerlo durante las últimas horas del día.
  • Estar en la cama el tiempo de dicado a dormir únicamente. Ante problemas para dormir es recomendable levantarse, salir de la habitación y hacer alguna actividad monótona hasta que lleguen de nuevo las ganas de dormir.
  • Técnicas respiratorias:
  • El entrenamiento en técnicas de relajación y en especial, aquellas que regulen la respiración, son capaces de restablecer el equilibrio interior que necesitamos.

TRATAMIENTO OSTEOPATICO PARA LOS TRASTORNOS DEL SUEÑO

Una gran parte del tratamiento osteopatico de corrección del sueño es a través de la osteopatía craneal y visceral.

A través de la terapia visceral sabremos que órgano estará afectado y van a repercutir sobre diversas emociones, provocando trastornos del sueño.

Por tanto es importante una salud interior, así como un equilibrio reciproco entre nuestra mente y nuestros órganos.

Es importante, primero demarcar de manera eficiente la causa en cada paciente, para así poder realizar un enfoque terapéutico personalizado y más eficaz para cada persona aquejada con este problema.

El sueño es algo necesario para vivir y gozar de buena salud